"La memoria es una artista extraña, redibuja los colores de la vida, borra lo mediocre y sólo conserva los trazos más hermosos, las curvas más conmovedoras..."
Marc Levy, Las cosas que no nos dijimos.
Tenía pendiente hace mucho tiempo la lectura de ese libro, pero creo que el azar ha elegido para mí el momento perfecto para ello. El azar o ese toque de magia que estoy convencida de que existe detrás de las cosas, que hace que los textos, las imágenes o los libros vengan a nosotros justo en el momento oportuno.
Si lo hubiera leído antes me habría hecho daño, mucho daño. Pero al leerlo ahora me ha emocionado sin herirme. Me he visto en un nuevo espejo, me he reconocido en otras palabras. La protagonista del libro pensaba que era feliz hasta que su vida se puso patas arriba de un día para otro. Se encontró inmersa en la oscuridad, pero dejó de estar ciega. Supo qué había ocurrido en realidad demasiado tarde... ¿o no?
Como dice el autor, demasiado tarde es un concepto que se aplica a las cosas que ya son definitivas.
Y tú y yo siempre hemos sabido que nada es aún definitivo...
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Lo tomo como una recomendación. El autor me gusta. Gracias por compartir.
ResponderEliminarUn abrazo
Nunca es tarde si de verdad ansiamos algo, o no deberíamos pensar que es tarde...
ResponderEliminarComo te dije en tu entrada de "mi pequeña", que pusiste en el blog de Care, llegue a tu blog desde allí...
Me encantan tus textos.
De este autor leí hace tiempo Ojalá fuera cierto. Me encantó tanto la historia como la forma en que fue escrita.
ResponderEliminarSaludos
"Nunca es demasiado tarde para quien es capaz de reinventarse cada día". P.T.
ResponderEliminarBesos...
Querida Eugenia, si al final puedes leerlo, me gustaría conocer tu opinión.
ResponderEliminarMe encanta tu blog, siempre estoy esperando un nuevo texto tuyo.
Un beso.
Querdia Rebeca, siempre es un placer conocer a nuevas personas que navegan por este océano de conexiones. Muchas gracias por tus palabras, las que has dejado aquí y en la entrada de mi pequeña... No dejé de llorar mientras la escribía, y supongo que por eso esas palabras están tan empapadas de tristeza que se atan como un nudo a la garganta de quien pasa por aquí y las lee.
Cantabria, ¡qué bonito lugar!
Bienvenida, y no dejes de venir cuando quieras.
Un abrazo.
Querida Begoña, este es el primer libro que leo de este autor y seguramente me compraré este que me indicas.
Y aunque no te comente mucho, tu blog es el que primero leo cada mañana.
Muchas gracias y un abrazo fuerte.
Mi querido Rkincaid, nosotros somos la prueba definitiva de ello.
ResponderEliminarUn beso.