martes, 22 de febrero de 2011
París, hemos vuelto.
La disfruté más a la luz del Sol suave de aquella primavera, cuando volví después de tantos años y de casi haber olvidado la primera vez que vine contigo. Después la he recorrido más veces, casi siempre sola, pero disfrutando de sus calles, sus cafés, sus pequeños bistros, sus tejados con buhardillas donde pudimos imaginar unos meses de futuro que nunca serían posibles...
Pero esta última vez ha sido muy distinta. Por la lluvia, que no consiguió desanimarnos a pasear durante horas debajo de ese minúsculo paraguas, y por la sensación de recorrerla con alguien capaz de disfrutar de esa ciudad o de cualquier otra con la misma intensidad que yo.
Alguien que, además, es un maravilloso compañero de viaje.
París, hemos vuelto. Juntos.
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Ah, pero... ¿llovía?
ResponderEliminarNo sé por qué no me fijé en esos pequeños detalles.
Un beso
París bien vale una misa.... Aunque sea enmedio de un aguacero
ResponderEliminarParis...la ville de l'amour...
ResponderEliminarEstuve con mi familia con 10 años, quizá regrese algún día, junto a mi pareja...El tiempo lo dirá...
Un abrazo,
Rebeca.
Rebeca, si te es posible, te recomiendo que vayas. París es una de las ciudades más bonitas para recorrerla a pie, paseando con tranquilidad y saboreando todos sus rincones.
ResponderEliminarEstoy segura de que os sentará de maravilla.
Un abrazo.