Soy un nombre no dicho, una presencia intuída, susurrada siquiera. Me asomo en tu expresión, en tu risa, en el brillo de tus ojos pero todavía permanezco agazapada detrás de los hechos, en las horas en las que nadie te ve. Estoy mezclada en distintas proporciones en el pasado, el presente y el futuro, no alterándote sustancialmente pero sí dándote otras características, otro color, una pátina distinta y más nítida, más evidente y tuya.Puedo incluso llegar a ser un pensamiento fugaz en un momento inoportuno, un suspiro quedo, un extraño deja vù, una pieza que habrá que encajar en este puzzle cambiante que nos hemos empeñado en montar. Y es que miramos con seguridad hacia atrás, pero avanzamos a tientas hacia el futuro..., ese tan extraño e imprevisto en el que lo normal sea que paseemos bajo un Sol lejano y exótico y lo extraordinario que nos encontremos en la cama, pero en pijama para leer un libro o darnos un beso de buenas noches.
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Hacía tiempo que no ponía algo de música
Hola amiga, si me permites, me voy a tomar la licencia de aconsejarte un par de cosas, porque por lo que veo, estás pasando por un momento que a mi me resulta familiar.
ResponderEliminarPrimero, deja que el pasado sea pasado, no lo alimentes más con tus pensamientos porque la vida debe seguir su curso, debes abrirte a experimentar las nuevas sensaciones del dia a dia, sólo así se vence la melancolía del ayer.
Segundo, no intentes averiguar lo que pasa por la cabeza de otra persona, porque te aseguro que es para nada. Yo muchas veces, presa de la desesperación del no comprender, he intentado saber de una manera u otra los pensamientos de la otra persona, lo que pensaba en cada momento acerca de mí, de lo vivido, y creo que es contraproducente, pues sólo aumentaba mi paranoia y mi obsesión por entender lo que estaba sucediendo.
Quédate con el significado de tu experiencia, y nada más.
PD: a lo mejor no tiene nada que ver lo que te he dicho con lo que estás sintiendo, pero yo he percibido esa sensación por tu parte a través de tu escrito.
Un beso enorme.
Muchas gracias por tus palabras, Psique. Creo que mi situación es un poco diferente, pero en cualquier caso te puedo asegurar que mi proceso de reflexión ya ha pasado. Es sólo que de vez en cuando miro hacia atrás, no con melancolía ni con dolor, sino casi te diría que con asombro.
ResponderEliminarEste momento para mí es dulce, querida Psique, y estoy segura de que va a ir a mejor ;)
Un beso enorme.